El Equipo Impulsor de la Reforma a la Función Pública (EIRFP), integrado por más de 20 organizaciones y universidades privadas, alzó su voz e instó al Órgano Legislativo para que aprueben reformas a la Ley de Función Pública para combatir la corrupción y el nepotismo, entre ellos la regulación de las plazas ad honorem.
El coordinador de EIRFP, Gustavo Amaya, destacó que “los sindicatos nos plantearon eliminar completamente el concepto de plaza ad honorem porque decían que era un mecanismo que facilitaba la corrupción o que incluso provocaba recargas laborales que violentaban los derechos salariales de los trabajadores”.
La reforma que plantea el EIRFP será en el artículo 12, agregando el numeral e) donde se condicionan las funciones de dicho cargo, entre ellos: debe ser de manera voluntaria, ser temporales, vinculadas al ámbito laboral de desempeño y especialización del trabajador, el ejercicio no implicará renuncia a derechos laborales. Las funciones se estipularán en un acuerdo.
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